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Jardínes secretos para sentir la primavera de Madrid

La primavera invade Madrid y recorre sus parques y jardínes. Alguno de ellos es parte intrínseca de la ciudad, otros en cambio aguardan a ser descubiertos por miradas curiosas. Recorrer sus esculturas o sus parajes naturales es una aventura urbana que solo podrás disfrutar en Madrid. Te invitamos a fascinarte con estos rincones inesperados en una ruta que comienza en tu lujoso Flat Sweet Home.

Parajes para enamorarse

Un sol que te acaricia, cielos de un azul deslumbrante y una temperatura idónea para caminar por parajes únicos. Así es la primavera en esta ciudad. Un momento radiante que puede transportate por momentos al siglo XVIII en un parque construido para jugar al amor.

El Capricho es uno de los grandes olvidados de los parques madrileños. Fue ordenado construir por la Duquesa de Osuna que inició sus obras en 1787. Tardó casi cuatro décadas en recrear el perfecto jardín de juegos. Hasta su casino o su sala de bailes llegaban reyes y aristócratas de la época navegando sus canales que estaban conectados con el centro de Madrid.

El Capricho

Además cuenta con esculturas, lagos, jardínes japoneses y franceses, un laberinto e incluso un bunker de la guerra civil. Una experiencia bucólica llena de historia e historias. Otro lugar cargado de romanticismo y oculto en el callejero de la ciudad es el Jardín del Príncipe de Anglona.

Escondido en la Plaza de la Paja, en pleno barrio de La Latina, es un visita obligada para quienes quieren redescubrir el amor bajo sus arcos floridos y una preciosa vista de Madrid. Fue construido en el siglo XVIII cuando el príncipe de Anglona vivía en una residencia que lleva en pie desde el siglo XV. Su estilo neoclásico y morisco te cautivará.

Flores, el aroma de Madrid

En el Museo Sorolla puedes encontrar cientos de las obras que convirtieron al pintor valenciano en un icono del arte mundial. Un placer añadido de esta visita ineludible es relajarse en el espectacular jardín que preside el palacio.

La belleza de sus fuentes te hace sentir la brisa de otros jardínes como el Generalife de Granada. Esa inspiración árabe te ofrece un punto de exotismo y de evasión que no podrás sentir en ningún otro lado de la ciudad.

Museo Sorolla

A veces el amor es un secreto o un susurro al igual que la existencia de la Rosaleda de Madrid. Este paraje idílico se encuentra ubicado en el Parque del Oeste, cerca de los atardeceres donde el sol se besa con el templo egipcio de Nebod. Sus miles de rosas crean un aroma único y unas visiones de belleza indescriptibles. Pasear rodeado de 20000 rosas de 600 variedades diferentes es un aliciente más para enamorarse de la primavera madrileña.

Las flores son la esencia de esta época. En la Dalieda de San Francisco podrás experimentar el colorido de las dalias y la arquitectura monumental de la Iglesia de San Francisco El Grande en un mismo lugar.

Una brisa primaveral te acompañará asomándote a las alturas de Madrid en una balcón ideal para pensar y sentir. No muy lejos de allí se encuentran dos parques donde encontrar paz y unas vistas espectaculares en plena ciudad.

Jardínes con vistas

No muy lejos de allí se encuentran otros jardínes más presentes en las guías de viajes convencionales. Se trata de los Jardínes de Sabatini. Este espacio verde de la ciudad se encuentra a los pies del Palacio Real y lleva abierto al público desde los años 30.

Coronado por una serie de estatuas de las dinastías monárquicas españolas y una escalera monumental es otro punto interesante de nuestra ruta debido a sus espectaculares vistas del palacio. Un lugar al que acudir al atardecer desde tu Flat Sweet Home San Miguel Market Apartment.

En el Parque de Atenas se encuentra una terraza donde saborear cócteles y vistas 360º de la Catedral de la Almudena, el espectacular Puente de Segovia y del río Manzanares. A su derecha se encuentra el Jardín de Las Vistillas.

La Violetera

Su balcón adornado con una estatua a una violetera deja entrever la falda verde de una ladera que te ofrece una visión única de la Casa de Campo y El Pardo, dos espacios naturales muy significativos de Madrid. En la planicie donde se asienta El Seminario se celebran conciertos y espectáculos durante las Fiestas de San Isidro el 15 de mayo.

Ambos espacios verdes desembocan en el Campo del Moro. Estos jardínes son idóneos para contemplar obras arquitectónicas como la Ermita de la Virgen del Puerto, la Puerta de San Vicente o el Palacio Real mientras te relajas a la ribera del río Manzanares a las puertas de la Casa de Campo. Una manera de sentir el Madrid más natural.

Los secretos naturales mejor guardados

La luz primaveral inunda cada rincón de la ciudad. Hay un lugar donde la estación se recrea especialmente. La Quinta de los Molinos es un espacio natural ideal para perderse entre bellos almendros en flor y sentarse a disfrutar del sol madrileño. En verano se celebran conciertos y eventos culturales que llenan de vida la zona. Aunque, te recomendamos esta época primaveral para disfrutar de su Casa del Reloj o de sus árboles floridos.

Quinta de Los Molinos

Muy cerca de tu Flat Sweet Home Príncipe de Vergara Apartment puedes encontrar la naturaleza más exhuberante en forma de flores, cipreses y álamos. La Quinta del Berro ha sido un regalo del rey Felipe IV que los madrileños disfrutan desde el siglo XVII. A los pies del famoso Pirulí se aisenta este jardín urbano idóneo para olvidar los ruidos de la ciudad.

En el centro de la ciudad también existe la posibilidad de sentir la brisa de la naturaleza. En el Paseo del Prado, el Jardín Vertical del CaixaFórum domina una de sus aceras. En la otra, se encuentra el Museo del Prado.

Los jardínes que dividen el museo de la Iglesia de los Jerónimos, una joya gótica única en la ciudad, son punto de encuentro de artistas y enamorados del arte. En este espacio puedes inspirarte para pintar o escribir. De noche, las luces del Ritz y del Palace, en la vecina Plaza de Neptuno, te acompañan en un momento íntimo digno de postal.

Dentro del Parque del Retiro y cerca de tu Flat Sweet Home Recoletos Penthouse se encuentran los Jardínes de Cecilio Rodríguez. Este jardín cuyo nombre hace honor a su diseñador es un idílico oasis urbano con pavos reales, estanques, un bucólico cenador y una intimidad que le convertirán en tu lugar favorito de Madrid. En él se suelen organizar eventos de todo tipo aunque es mucho más arrebatador disfrutarlo en petit comité.

Jardínes de Cecilio Rodríguez

Dentro de la Estación de Atocha, de estilo neoclásico, se oculta una joya natural. El invernadero de Atocha aglutina un vergel con una exhuberante vida vegetal y unas tortugas que despiden a los viajeros convertidas en las mascotas de la ciudad. Nunca la espera en una estación ha sido tan hermosa.

Parques urbanos

Exiten una gran variedad de parques urbanos en Madrid. Uno de los más singulares es el Parque de Berlín. Un enclave que te invita a viajar por la historia y contemplar una parte del verdadero Muro de Berlín. Además de esta visita obligada a uno de los símbolos del siglo XX, el parque guarda en su interior piezas como una estatua conmemorativa de Beethoven y la serenidad de unos jardínes donde reina la paz y el silencio. Un paseo primaveral por la historia para completar tu experiencia Flat Sweet Home.

Parque de Berlín

Uno de los lugares más desconocidos de Madrid son los Jardínes Pablo Sorozabal. Todo un secreto que merece ser descubierto en plena calle Príncipe de Vergara e inagurados en 2015. Su vanguardista composición y su homenaje al compositor Pablo Sorozabal no pueden eclipsar al Parque del Ajedrez. Un gigantesco tablero donde 32 figuras gigantes iluminadas con leds forman las piezas del emblemático juego de mesa.

Flat Sweet Home te invita a recorrer la primavera más radiante, llenar tus pulmones de la brisa de Madrid y recorrer a pie lugares de ensueño. Toda una vibrante experiencia que merece la pena ser vivida. Tu estancia te descubrirá una urbe que más allá de su gastronomía, su arquitectura y su cultura te aguarda para contarte secretos rodeados de una naturaleza orgullosa de la primavera.

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